lunes, 26 de octubre de 2015

¿Cuánto tiempo hacía que no la escuchabas de verdad?

Que no te parabas a mirar como se le hinchaban las mejillas cuando reia, o como se frotaba los ojos aprovechando no llevar maquillaje. Cuándo fue la última vez que hablaste con ella de verdad. ¿Acaso no te has dado cuenta de que ahora te habla sin miedo?

Hace tiempo, y lo sabes, que no te parabas a escuchar de verdad lo que su corazón decía. Que no te atrevías
a estar sin tocarla. Porque cuando te quitan la droga es cuando la echas en falta.

 Cuándo tuviste la ultima lucha interior sobre si atreverte a darle un beso o no.

Porque no vale estar siempre con las bromas y perder la perspectiva. No sirve que la quieras si se lo dices por rutina. No sirve que pretendas hacer sorpresas misteriosas vacías porque ya nada os llena.

Cuánto estabas dispuesto a gastarte en cerveza para alargar los minutos con ella.

Y te has dado cuenta pero quizás sea tarde, el mal está hecho, sin embargo hay una luz nueva que abre el cielo, la esperanza. Porque ahora te estás arañando por dentro por haber estado atando a tu alma libre.

Cuánto te arrepientes de haberla conocido.

Y es que puedes engañar a un águila que nace con pollos pero un águila que nace y se cría entre águilas, amigo mío. Esa fiera es indomable. Por mucha comida o comodidad que ofrezcas. No hay persona en el mundo que le haga quedarse en casa cuando sus pies quieren bailar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cuidarte también es proclamar que no puedes.

 No puedo sola.  Esto es demasiado complicado.  Necesito ayuda.  Qué buen día para estar orgullosa de todo el progreso que he hecho.  ¿Qué e...