martes, 2 de octubre de 2018

Rutinas.


¿Hasta qué punto estas orgulloso de la tuya? 


¿Quien decide lo que tenemos que hacer? 
No se hasta qué punto uno mismo es dueño de su propia vida, de sus tiempos, de sus silencios. Nos vemos demasiado arrastrados por el ritmo que nos lleva en el que las horas están puestas, en su mayoría, por los demás. 
Cuando eras niño pensabas como un niño y sentías como un niño... y tus tutores marcaban tu ritmo. 
Colegio, almuerzo, estudio, merienda, cena, cama. 
Y vuelta a empezar. 
Cuando eres adulto si alguien organiza tu rutina te aseguro que no te quiere tanto como te quisieron tus primeras agendas, tus padres. 
Ahora todo lo que importa es cuan productivo puedas ser. 
Cuántos beneficios podemos sacar de ti. 
Incluso en tus citas... te das cuenta de que valoras a la gente por las repercusiones positivas que pueden tener sobre ti, y esto no está del todo mal siempre y cuando seamos también generosos con nuestro tiempo. 

¿Si fueras a morir esta noche al entrar en la cama... te gustaría lo que tienes programado para el día de hoy o lo cambiarías? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cuidarte también es proclamar que no puedes.

 No puedo sola.  Esto es demasiado complicado.  Necesito ayuda.  Qué buen día para estar orgullosa de todo el progreso que he hecho.  ¿Qué e...