jueves, 8 de mayo de 2014
"Pedían marcha mientras las palmas se solapaban unas con otras..." Ese era uno de los momentos de euforia que tanto me gustan y me hacen sentir viva. "... Y cuando mejor estaban, lo vio. Y ahí paro todo. Estaba guapo como nunca, apoyado en un árbol. Había una chica a su lado, podría haber sido amiga mía si no estuviera allí. En ese instante se convirtió en enemiga. " Y ya se acabó la marcha, la noche y las ganas de fiesta. Todo se quedo en una mirada cruzada, un instante fugaz que ninguno había olvidado tras la resaca.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Cuidarte también es proclamar que no puedes.
No puedo sola. Esto es demasiado complicado. Necesito ayuda. Qué buen día para estar orgullosa de todo el progreso que he hecho. ¿Qué e...
-
Que nunca has sabido el peligro que tengo, que no conoces mis peores momentos y no te das cuenta cuando estoy echandole al asunto agallas qu...
No hay comentarios:
Publicar un comentario