No conoces a una persona de nada y de repente te está sosteniendo entre sus brazos, balanceándote de un lado para otro y no tienes más que dejarte llevar, no es sexo pero tampoco amor. Es que esa persona puede hacerte vibrar tocando las cuerdas indicadas. Y no solo vibras tu. También cualquiera que sepa admirar la belleza de dos cuerpos moviéndose al compás.
oh música, ¿que haríamos sin ti?
Imaginaos a romeo y a julieta, imaginarme a mi pidiendole más a la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario